Cuidado con las espigas
🌾Las espigas son uno de estos enemigos desconocidos de los perros. Por su forma, vuelan con mucha facilidad y es muy posible que se claven en la piel, las orejas o la nariz de nuestros peludos. No debemos alarmarnos, pero sí tener en cuenta ciertas precauciones que podemos tomar para asegurarnos de que pasamos unos meses de primavera y verano sin complicaciones.
🐕🦺En estos meses, es una buena idea que revisemos frecuentemente la piel de nuestro perro, apartando su pelo. Si encontramos una espiga y está clavada limpiamente y sin rastro alguno de infección, podemos retirarla nosotros y vigilar que el perro no se lama la zona afectada, pero ante cualquier complicación debemos acudir al veterinario.
‼️El verdadero peligro llega cuando una espiga se introduce en algún orificio, especialmente en los ojos y en la nariz. En estos casos, si no actuamos con rapidez, se pueden llegar a producir serias complicaciones. En concreto, los ojos son un foco extremadamente peligroso, pues el perro puede correr el riesgo de perderlo.
☝️Con todo, no debemos alarmarnos, pero sí estar atentos durante nuestros paseos a cualquier señal de que algo le molesta, que anda de forma extraña o cojea, o que de pronto se pone muy nervioso. Y ante cualquier duda, ya sabes, acude al veterinario sin demora.